
Mientras era celebrada la audiencia los padres de otros dos
menores, de cinco y cuatro años represivamente radicaban querellas en contra
del sacerdote también por abuso sexual contra sus hijos, que cursan estudios en
el Colegio Santa Rita.
El sacerdote fue sacado escoltado hacía del despacho de la
procuradora Fiscal, como medidas de seguridad, para ser trasladado al
destacamento de Quita Sueño y luego a la cárcel de Najayo.
Como en pocas ocasiones los pasillos del Palacio de Justicia
estuvieron arropado por decenas de personas y comunicadores de diferentes medios
de comunicación, para percatarse de los resultados de la audiencia.
La menor de tres años y ocho meses es hija de un Mayor de la Aranda
Dominicana, y de una respetable familia de esta ciudad.
Autor
Carlos Corporán
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